La jornada del martes transcurrió con absoluta normalidad en las calles de Breslavia, donde los aficionados del Real Betis y del Chelsea intercambiaron cánticos de manera amigable en las terrazas de la Plaza del Mercado y otros puntos emblemáticos de la ciudad hasta que a la caída de la tarde empezaron a producirse los primeros incidentes, algunos provocados por la excesiva ingesta de alcohol y otros por los de siempre, esos que van de negro y aprovechan estos grandes eventos para acudir a reventarlos. La cosa no pasó a mayores y después de algunas escaramuzas, la inmensa mayoría de hinchas béticos e ingleses siguieron viviendo la previa en armonía e intercambiando cánticos hasta que pasadas las doce de la noche todos los bares céntricos comenzaron a cerrar.
Un gran número de efectivos policiales intervino en varias ocasiones por distintas zonas de Breslavia, en especial en su punto neurálgico, la Plaza del Mercado, por la que hoy pasarán seguro los más de 40.000 hinchas que luego acudan al estadio y donde se espera un ambiente espectacular.
Después de los incidentes del martes, la Jefatura de Policía Provincial de Wroclaw (Breslavia), informó de lo siguiente. «Los agentes uniformados reaccionaron de inmediato, lo que evitó una mayor escalada del conflicto o comportamientos negativos. La cantidad de fuerzas policiales preventivas y operativas, junto con su presencia constante en los puntos donde se reúnen o circulan residentes y aficionados deportivos, es tan grande que todos pueden sentirse seguros».
Para intentar contener y controlar a los ultras la Policía apostó por patrullas a pie y vigilancia con drones y helicópteros y utilizó en varias intervenciones gas pimienta.
